APRENDIENDO A VIVIR

        

         La vida se desarrolla a veces sin control ni timón que la dirija, tomando rumbos aleatorios; o en el peor de los casos, navega a la deriva, tomando caminos perdidos que nada tienen que ver con lo que teníamos planeado.

               La vida no es más que un juego que hay que saber dirigir y controlar. Conociendo su funcionamiento podremos jugar bien, para ser ganadores y así poder conseguir lo que nos proponemos. En este juego participamos todos, pero aquél que conozca bien las reglas actuará con menor margen de error. Sin embargo quienes no sepan mover los hilos del destino perderán el control de sus vidas, de forma que cualquier desenlace podrá tener lugar. 

        LA REGLA UNIVERSAL para saber vivir es tan fácil y gratificante como pensar y sentir aquello que deseas; tan simple y eficaz como mantener en la mente la imagen de la persona que quieres llegar a ser; tan disparatado y elocuente a la vez, como aceptar que eres tú quien ha elegido todo lo que ha acontecido en tu vida, sean alegrías o sean tragedias. Eres tú quien decidiste un día mantener en el pensamiento inesperadas desventuras o merecidas dichas.

               El truco para poder triunfar en esta aventura está en dedicar toda nuestra atención a lo que SÍ DESEAMOS y no malgastar ni un sólo segundo en lo que NO QUEREMOS. A menudo embarcamos en una sucesión de no, no, no... improductivos: lo que NO deseamos que acontezca, lo que NO nos gusta de nuestra vida, lo que NO tendría que haber ocurrido... Enfocamos nuestro interés en miedos y preocupaciones que frenan y distorsionan nuestros propósitos.

        Ahora que conocemos la  clave para avanzar por el camino deseado, podemos considerarnos ya como auténticos ganadores, que guardando un as en la manga, jugamos con ventaja, convicción y seguridad de utilizar la estrategia adecuada. Aprende a vivir, domina las reglas del juego, permanece atento y vigilante, no bajes la guardia, no dejes que tus miedos y preocupaciones entren en juego, no permitas que te ganen la partida; sé TÚ el director y guía de poderosos pensamientos y emociones.